Día Mundial del Agua 2022
22 marzo 2022¿Cuánta electricidad proviene de energías limpias en América Latina?
27 mayo 2022Fuente: El País
López Obrador ha asegurado que el país alcanzará sus objetivos de energía renovable con estas plantas, pero los expertos dudan de que esto sea posible.
El presidente Obrador lleva meses repitiendo que la gran apuesta de su gobierno para cumplir con sus compromisos medioambientales es la energía hidroeléctrica, «la más barata y limpia».
Desde entonces, los expertos han salido a desmentir esta afirmación: es tres veces más cara que la solar y la eólica, y cada vez se considera menos limpia por sus emisiones de metano, su impacto en los ecosistemas y su dependencia de un recurso escaso: el agua.
Pero, sobre todo, lo que cuestionan es la idea de que la energía hidroeléctrica pueda aumentar su generación lo suficiente como para cumplir el objetivo de México de alcanzar el 35% de energía limpia en 2024.
Las limitaciones a las que se enfrentan estas plantas no son sólo tecnológicas. El cambio climático está haciendo que las sequías sean más frecuentes y prolongadas en el país, y cuando el agua escasea, el consumo humano y agrícola son prioritarios.
Por otro lado, al igual que las sequías son más prolongadas, las lluvias torrenciales son más frecuentes como consecuencia del calentamiento global, lo que puede provocar el desbordamiento de las presas.
Entre otras cosas, las centrales hidroeléctricas no sólo se ven afectadas por el cambio climático, sino que también contribuyen a la crisis. Cuando se construyen, se despejan grandes extensiones de terreno para crear embalses (lo que libera CO2 a la atmósfera) y los ecosistemas y los medios de vida de las personas se ven afectados por el desvío del curso del río.
Además, la materia orgánica que se sumerge en las presas entra en estado de descomposición y emite metano.
Otro mito que quiere disipar es que la energía hidroeléctrica es la más barata. Según datos de la Comisión Reguladora de Energía, cuesta 1,211 pesos el megavatio hora, casi tres veces más que los 377 pesos de la energía solar y eólica, que están en manos de empresas privadas.
¿Por qué es tan caro? Porque, entre otras cosas, el agua es un recurso limitado que tiene un precio, a diferencia del sol o el viento. Por eso la energía solar y la eólica son actualmente las primeras fuentes de energía que se dispensan: porque son las más baratas.